Queridos Reyes Magos
Queridos Reyes Magos, este año me he portado muy bien. He hecho los deberes, he comido el brocoli sin rechistar y hasta he ayudado cuando tocaba limpiar la casa. Por eso, ¿qué tal un pase de batalla para el Fortnite?
Queridos Reyes Magos, este año me he portado muy bien. He hecho los deberes, he comido el brocoli sin rechistar y hasta he ayudado cuando tocaba limpiar la casa. Por eso, ¿qué tal un pase de batalla para el Fortnite?
Comienza 2017 con los poderes públicos en plena forma, haciendo gala de su afán de omnipresencia en nuestras vidas y de sus celos hacia todo lo que no puedan controlar directamente y manipular a su antojo. Esta vez le ha tocado el turno nada menos que a la tradicional cabalgata de los Reyes Magos.
Se trata de un momento mágico para muchos niños, y por tanto ideal para llamar su atención sobre determinados mensajes políticos que parecen ser la única cosa que entretiene y ocupa las entumecidas mentes de muchos de los adultos. En Vic y otras localidades catalanas SS.MM. de Oriente serán recibidos entre banderas denominadas “esteladas”, un diseño de fantasía de inspiración cubana que data de la época de entreguerras. Sigue leyendo
Hoy, que han pasado ya cuatro días de la gran chorrada, reflexionemos.
Reflexionemos sobre los magos, los camellos y Facebook; sobre alcaldes del populacho, más que del pueblo, que han sido los verdaderos reyes de las infantiles cabalgatas. Sobre el encono de políticos de retaguardia que juran odio eterno a los modistas epifánicos y, por encima de todo, sobre la supuesta burla de facciones de un mismo partido (distintas caretas para el mismo actor) a las ínclitas tradiciones de nuestros padres que, dicen, son católicas antes que profanas.
Porque no, damas y caballeros: el trágico espectáculo del quinto día del año del Señor 2016 no ha humillado a nadie. Más allá de las intenciones de seres de carne y hueso que dicen hablar en nombre del Todo; allende los heraldos olímpicos de la divina voluntad populachesca, que no popular, la obra no ha ido donde se ha pretendido que ha llegado. Sigue leyendo