Ayer escuché enternecida las declaraciones de un niño francés que afirmaba que Francia es la cuna de los Derechos Humanos.Y me tocó el corazón porque vi, con natural envidia, que un niño en Francia, a tan corta edad, ya se muestra orgulloso de su país y de su pasado, aunque acto seguido me preguntase extrañada: ¿Se referirá a los Derechos Humanos que emanaron del uso indiscriminado de la guillotina en aquella gran plaza parisina donde luego taparon sus vergüenzas llamándola “de la Concordia”? Sigue leyendo