Una sociedad automática
El comportamiento autómata en la sociedad no es un fenómeno en absoluto contemporáneo. De todas las épocas emana una sociedad purista y bienpensante cuyos postulados ideológicos y doctrinas, son impuestos sobre el colectivo general blandiendo como única razón una supremacía moral e ideológica arraigada en los más profundos convencimientos adquiridos a través de la norma, la ignorancia y la costumbre.
Los totalitarismos ideológicos y espirituales, son intrínsecos a la condición humana en su forma más visceral, ya que unificar el pensamiento en una doctrina que aniquile la capacidad individual de discernimiento es la herramienta de conducción más antigua forjada por la mente. Sigue leyendo