Mientras el aire es nuestro
Algunos querrían prolongar el verano por los siglos de los siglos. No es mi caso. Ya finalizado el rodaje del inicio del curso académico y político, todo está en marcha para algo nuevo. La arena, el calor, la ociosidad, quedan reducidos a lágrimas en la lluvia, y del verano sólo cabe preservar, si de ello hemos gozado, la capacidad tan valiosa de disfrutar de cada momento. Sigue leyendo