El lobo es un lobo para el lobo: problemática del derecho animal
“Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.”
Génesis 1:28
Hay en el pensamiento judeocristiano una visión del ser humano como el último horizonte de la Creación. A lo largo del Génesis la naturaleza es introducida primero como un derecho y después, tras el pecado original, como una obligación que preservar ejemplificada en el relato del Arca y el Diluvio. Dios hace responsable a Noé, por su condición racional -divina- de resguardar a la naturaleza bajo su constructo. Subyace la idea de que la razón hace al hombre el centro del orden natural, y por ello responsable de cobijarla dentro del arca de la razón. Sigue leyendo